LOS SUE脩OS, NUESTRA VIDA EXTRA QUE PONE TAN NERVIOSO AL MATERIALISMO CIENT脥FICO馃З

Go then, there are other worlds than these.

― The Gunslinger, The Dark Tower


Cuanto m谩s v铆vido, realista, impactante o trascendental sea un sue帽o para ti, m谩s insultantemente l贸gica, retorcida, materialista y forzadamente racional, se volver谩 la explicaci贸n que te expongan, acerca de lo que significa ese mismo sue帽o, cuando quieras ahondar en el significado de esa experiencia, para aquilatar esa realidad individual.

No se atreven a decir “no s茅''. Simplemente eso. Aquellos que no tienen el valor suficiente de salir del materialismo y reconocer simplemente, que no saben qu茅 decir, porque no tienen una respuesta que salga de sus l铆mites correctos y miedosos, dentro de lo conocido. A lo mejor los sue帽os no significan nada, y simplemente son lo que son: otra realidad.

CUANDO SABES QUE ERES IGNORANTE PUEDES APRENDER


El principal problema de admitir “no s茅”, es que esa ignorancia abre la puerta a muchas m谩s posibilidades de exploraci贸n, que pueden cambiar y cuestionar todo lo que el materialismo cient铆fico y la ciencia oficial, tienen por dogmas inquebrantables. Esto no se mira, esto no se toca... B谩sicamente es el resumen de todas las respuestas que cierran c铆rculos.


¿Tan dif铆cil es admitirlo? Si dicen que la ignorancia es atrevida, entonces la panacea del conocimiento cient铆fico m谩s puntero, abanderado por la NASA, se llevar铆a la palma. A m铆 abusar tanto del CGI a estas alturas, me dar铆a verg眉enza ajena y propia, pero como no tengo patr贸n cient铆fico que otorgue valor de verdad, todo lo que diga es cuestionable.

Cuando no buscas tener raz贸n, y lo que quieres realmente es aprender y conocer la naturaleza de la realidad para saber por qu茅 y qu茅 est谩s haciendo aqu铆, empiezas a molestar. Te empiezas a mover en terrenos, donde la certeza material que has tenido toda tu vida deja de funcionar porque no tiene explicaci贸n, a nuestra segunda vida en los sue帽os.

Los he empezado a llamar as铆 desde hace tiempo, como la segunda vida. No es que haya encontrado una respuesta definida a todo lo que me pasa cuando sue帽o, pero s铆 que he empezado a reconocer realidades, que tienen una explicaci贸n y que se corresponden con ra铆ces muy humanas a煤n por explorar, que nadie se ha tomado la molestia de ense帽arnos.

EXPLORAR DENTRO PARA HALLAR RESPUESTAS


En cambio, el esfuerzo por digitalizar nuestras vidas es cada vez es mayor, m谩s forzado y condicionado, para poder vivir en sociedad. Y es precisamente por ah铆 por donde no voy a pasar. Se nos fuerza a delegar nuestra voluntad y lo m谩s humano de nuestra esencia, en elementos digitales controlados por terceros ¿estamos locos? ¿es que nadie lo ve?


Se nos proh铆be mirar hacia dentro y explorar nuestro interior, pero no de forma expl铆cita aunque si ya casi pr谩cticamente a estas alturas, la prohibici贸n es descarada. Les basta con no dejarnos tiempo para la introspecci贸n, el silencio y para saber y aprender a conocer los mecanismos humanos internos, que tenemos pendientes por desarrollar y despertar.

Temen lo que no pueden controlar y si esto es as铆, es porque nuestro mundo interior tiene mucho m谩s peso y poder del que imaginamos. por eso cada vez la intromisi贸n en las libertades individuales es mayor. El af谩n de control nace del miedo a no saber c贸mo reacciona el individuo cuando decide tomar su propio camino, bajo sus propias normas.

Ese miedo a nuestra libertad individual es atroz, y como en los sue帽os no encontramos limitaciones, cualquier explicaci贸n que se nos d茅 acerca de esta realidad, estar谩 siempre cerrada y acotada, dentro de l铆mites insultantemente explicables, que ya rozan lo rid铆culo. Quiz谩s los sue帽os no tienen m谩s explicaci贸n que la realidad que experimentamos en ellos.

NO SABEMOS NAVEGAR POR LOS ESTADOS DE CONSCIENCIA


Quiz谩s sean reflejos de l铆neas de tiempo alternativas, de otros yoes en realidades menos densas a la que nos encontramos atrapados ahora mismo. Los circuitos cerrados que han sido construidos en este entorno tridimensional, sirven de alimento a trav茅s de nuestro peaje energ茅tico, pero no toda la realidad material que nos rodea, es el total de la realidad.


Aunque los considero realidades completas, no puedo demostrarlo, pero dentro de los sue帽os tengo recuerdos, de cosas y lugares recurrentes, que se repiten o se asemejan en los que ya he estado anteriormente, y en los que he experimentado solo en sue帽os. Esos recuerdos, vuelven solamente cuando me encuentro en ese estado y entorno on铆rico.

Como una realidad aparte en la que no encontramos contradicciones, a menos que estemos recuperando la consciencia pr贸xima al despertar, y es cuando caemos en que estamos en un sue帽o. Cuando esto pasa, no tardamos mucho en despertarnos, es como si no nos di茅ramos permiso para convivir en ambas realidades, quiz谩s por miedo o inconsistencia.

Como si no pudieran darse las dos realidades simult谩neamente, aunque se trate de la misma consciencia que es la nuestra. Quiz谩s cuando despertamos, la vida en la dimensi贸n on铆rica sigue con o sin nosotros, de igual manera que cuando morimos, la vida sigue y el mundo sigue independientemente de que nosotros lo veamos, estemos presentes o no.

LA REALIDAD NO ES EXACTA, PERO ES COMPARTIDA


Esto que acabo de decir contradice al experimento Young, o de la doble rendija, que nos demuestra que el observador por el mero hecho de observar, altera la realidad. Al tratarse de una realidad compartida, como tambi茅n podr铆a serlo la on铆rica, si podemos afectarla, lo hacemos parcial y proporcionalmente a nuestra implicaci贸n y participaci贸n en ella.


Nada de esto ser铆a un problema, si no tuvi茅semos memoria. Simplemente no nos acordar铆amos de lo so帽ado. Pero el hecho de que al despertar, todav铆a mantengamos aunque sea un recuerdo leve de los so帽ado, que puede tardar m谩s o menos en desaparecer, hace que me pregunte el por qu茅 despu茅s se nos olvida tan r谩pido.

Ese recuerdo de una experiencia tan v铆vida y tan real, no sigue el mismo patr贸n que el resto y tiende a disolverse a una velocidad tan fugaz, que a menos que hagamos un ejercicio consciente por conservarlo, cont谩ndolo, escribi茅ndolo o repiti茅ndolo para no olvidarlo, puede desaparecer tan r谩pido, que nos haga olvidar lo trascendente de esa experiencia.

Por un lado u otro, lo cojas por donde lo cojas, parece que tanto el propio dise帽o del patr贸n de sue帽o en cuanto a la memoria, como el condicionamiento materialista a explicarlo todo reduci茅ndolo casi a una an茅cdota, me hace desconfiar, como de todo aquello en cuanto preguntas y te se帽alan a otro lado, en el que no encuentras respuesta para que lo olvides.

Quiz谩s lo 煤nico que pueda hacer, es seguir navegando por este entorno on铆rico, hasta encontrar respuestas a una realidad a la que tanto tratan de restar importancia.

Somos antih茅roes en un mundo que ha dejado de creer en los hombres buenos.

Comentarios

  1. Qu茅 casualidad que justo 茅ste escrito ha llegado a m铆 cuando llevo un tiempo pregunt谩ndome por lo mismo, curioso, ¿no?
    Es m谩s, llevo un tiempo en el que trato de interceder en mis propios sue帽os para liberarme de pesadillas, malos sue帽os o sue帽os rar铆simos que tengo desde hace bastante tiempo.
    Hasta el momento no he sido capaz de interceder de manera consciente y directa para liberarme de esos sue帽os de los que personalmente creo que no son propios, sino inducidos de alguna manera o quiz谩s es que no entienda a煤n bien en qu茅 situaci贸n est谩 mi “otro cuerpo”. No se si me explico bien.
    No s茅 c贸mo entrenar a mi yo on铆rico para defenderse en los sue帽os, siempre aparece observadora y sumisa ante las situaciones que se le plantean, aunque en el fondo no quiera estar ah铆, pero es incapaz de pronunciar una sola palabra para cancelar esa situaci贸n que est谩 viendo o viviendo.
    Me resulta un tema interesante.

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  2. Yo he tenido sue帽os muy locos pero el que realmente me marc贸 fue un sue帽o de hace unos a帽os, mi t铆o hab铆a fallecido en un accidente. El hecho es que se me apareci贸 en sue帽o, yo totalmente consciente de que estaba so帽ando y que el estaba muerto. Est谩bamos en una monta帽a sentados pero en el cielo se ve铆an los planetas muy muy cerca mucho m谩s cerca de lo que vemos la luna. Charlamos durante un tiempo hablando de la familia y de la forma en que todos est谩bamos pasando la situaci贸n de su muerte, el me asegur贸 que estaba bien y que no nos preocuparamos por el, que hab铆a dejado dinero de respaldo para su mujer y sus hijos escondido en la pared del 谩tico, me dijo exactamente donde lo ten铆a guardado y que cuidar谩 de mi t铆a y mis primos. Me cost贸 mucho tomar valor y decile a mi t铆a lo que hab铆a so帽ado y mayor fue nuestra sorpresa encontrar el dinero exactamente en el lugar que me indic贸. De esto ya a pasado casi 10 a帽os y lo recuerdo como si fuera ayer, cada detalle

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  3. An贸nimo6:38

    En mis sue帽os los arcontes recrean una realidad oscura. Se visten de familiares, pero caen por detalles. Una vez me doy cuenta empieza la lucha, en la que lamentablemente no siempre logro evitar el robo de energ铆a, y el da帽o f铆sico a mi cuerpo eterico. Pero tengan fuerza y luchen, quiero creer que pronto venceremos.

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