EL EGO, PASO A LA TRAMPA ARCÓNTICA

We don't need no education, We don't need no thought control. No dark sarcasm in the classroom... Teachers leave them kids alone. Hey! teachers, leave them kids alone! All in all it's just another brick in the wall. All in all you're just another brick in the wall.

― Pink Floyd, Another Brick in the Wall

No hay peor ciego que el que no quiere ver. Puedes gastar toda la energía que quieras en tratar de convencer a personas que no desean ser convencidas. Los que de algún modo y según nuestra percepción, nos consideramos conscientes o despiertos, bastante a menudo podemos caer en el error de querer salvar el mundo.

EL EGO, PASO A LA TRAMPA ARCÓNTICA

Es la llave de entrada a la trampa arcóntica: aprovechar lo mejor de ti, tu mejor parte y lo más noble de tu ser, contra ti mismo. De forma que durante la batalla, en esta guerra de desgaste te quemes, malgastando todas tus energías en tratar de abrir mentes, ayudar a despertar, divulgar consciencia y convencer a las personas que amas y a las que te rodean, de que una cosa es lo que nos dicen, y otra muy diferente la realidad a la que estamos sometidos por condición humana.

No podemos ahorrarles el camino de su propio descubrimiento. De igual forma que nosotros hemos llegado a las conclusiones necesarias, que nos han hecho tomar esta opción de consciencia, independientemente de lo que diga el resto del mundo… porque ya sabemos de qué va el rollo.

Tratar de ahorrarles este mismo camino a los demás, explicándolo todo con pelos y señales, desde nuestras propias palabras y según desde nuestra modesta y limitada percepción, es cómo tratar de encapsular el despertar de consciencia.

Claro ¿y quién soy yo para despertar a alguien? Absolutamente nadie, y más cuando una mayoría muy representativa de la población, está optando activamente por la sumisión continúa y degradante a nivel social y de comportamiento,  y además lo está haciendo con agrado pensando que así beneficia a los demás.

LA INGENIERÍA SOCIAL, FÁBRICA  DE NARRATIVAS

Cuándo crees que estás haciendo algo bien y algo noble, y desde arriba te lo colocan además, con el frame de ser un acto heroico, las herramientas del mainstream hacen su trabajo. Todos quieren ser héroes y apuntarse un tanto. El ser humano es vanidoso,  y el ego un mal cómplice porque le gusta que le den aplausos.

Y así tienes a masas ingentes de población, que creen solemnemente que aguantar todo lo que nos echen, y que de hecho nos siguen echando intencionadamente y de manera programada según agenda, supone un bien social común o una especie de acto heroico, que les salvaguarda de cualquier peligro o penalidad. Porque claro, si haces todo lo que te dicen “todo irá bien”. 

Masas dormidas que se dirigen individuo tras individuo, en fila india a la puerta del matadero. Haciéndolo, plenamente convencidos de que en efecto están salvando vidas con su forma de actuar sometidos con agrado al mainstream. ¿Recuerdas aquello que les gusta tanto decir en las campañas de propaganda gubernamentales de “no todos los héroes llevan capa”? Les encanta reírse de la gente con estas mierdas.

Dile a un cobarde, que seguir tus órdenes de sumisión son en realidad cumplir un acto heroico. Díselo, y su sensación de confort y conformismo consigo mismo, se sentirá tan recompensada, que no solo seguirá sometido con agrado, sino que se convertirá en policía social, haciendo valer su sumisión como norma a los demás. Dile a un cobarde que lo está haciendo muy bien y tendrás un cobarde para toda la vida, un alma esclavizada más, que seguirá contribuyendo a la rueda ciclo tras ciclo, uno, y otro y otro y otro... 

UNA MASA CRÍTICA CRECIENTE

Mientras tanto, algunos y cada vez más, hemos aceptado unas premisas que no todo el mundo está preparado para digerir, y esto a veces se nos olvida. Tocamos registros para los que no se nos entienden, bien por escasa apertura de mente, bien porque no se nos entiende, o no no sabemos hacer entender… o simplemente porque el interlocutor no está interesado en recibir el mensaje. 

Gastamos demasiada energía en hacernos entender, y gracias a ello nos llaman conspiranoicos. Poner demasiado énfasis en querer convencer eso traduce ansiedad a la hora de comunicar el mensaje; lo que hace que quien lo recibe, pueda mostrar rechazo.

Es como si quisiéramos hacerles todo el trabajo y que se traguen la píldora. En lo que debemos ayudar, es precisamente en esta apertura de mente, para que nuestros seres queridos y la gente que nos rodea, puedan encontrar su propio camino.

En ningún caso, que nosotros les entreguemos un resumen exacto encapsulado del contenido que nosotros entendemos, porque precisamente esto es un camino individual, que ha de recorrer cada uno. Nuestro contenido solo lo entendemos nosotros, porque para eso nos vale a nosotros.

EL MODELO DE MENTE COLMENA

Nuestra fuerza está precisamente, en que no somos una sola versión única, sino que cada uno de nosotros somos un elemento separado del original: un fractal de la fuente que por encima de todo, ansía aprender de la experiencia, siendo esta experiencia particular, única y exclusiva de cada uno.

Todo lo contrario, a lo que significa la mente colmena globalizadora, que todo lo quiere uniformizar en un cóctel de identidades, en el que ya no exista una identidad  o realidad individual, sino que todos se colectivice  bajo una realidad única a la que nos quieren someter. El objetivo de esta mente colmena, es precisamente hacer desaparecer la singularidad, capaz de despertar esa consciencia,  ya que pone en peligro la estabilidad de este sistema artificial.

No hay mejor predicación que el propio ejemplo. Lo que realmente hace que la gente se cuestione cosas y se pregunta cosas, es que vea con sus propios ojos, un comportamiento y una manera de vivir que se diferencie del resto.Y si ahora mismo, nos están gobernando a través del miedo, si conseguimos vivir esta vida aparte de este miedo, por encima de este miedo y con la libertad suficiente, para vivir en sociedad a nuestra manera, eso mismo, es lo que les hará cuestionarse ¿qué está pasando aquí?

Podemos perseguirlos para convencerles todo lo que queramos, sin obtener un solo fruto. Pero si a través de nuestro testimonio de vida,  conseguimos llamar su atención,  serán ellos los que dando ese paso activo,  inicia en su propio camino individual de descubrimiento, que es a fin de cuentas, lo que entendemos como el despertar de consciencia. No debemos encapsular su despertar, les estaríamos negando el derecho a su propio camino. Un camino que ellos mismos deben recorrer.

Somos antihéroes en un mundo que ha dejado de creer en los hombres buenos.