LA 脡LITE TIENE UNA AGENDA, OK ¿Y LA NUESTRA QU脡? 馃寪

In the event that I am reincarnated, I would like to return as a deadly virus, to contribute something to solving overpopulation.

― Philip of Edinburgh


Uno puede considerarse despierto y probablemente lo est茅, Pero con el 谩nimo de conocer al enemigo para poder vencerle tendemos a entrar en un detalle, que nos coloca la mayor铆a de las veces en una posici贸n reactiva. Estamos tan pendientes de la informaci贸n que nos llega, y de las amenazas de la agenda globalista tanto, que podemos caer en el error de olvidar nuestra propia agenda.

¿CONDICIONADOS A UNA AGENDA QUE NO ES NUESTRA?


Porque claro… tenemos una agenda propia ¿verdad? A veces estoy empezando a pensar que le tenemos tanto miedo a la 茅lite y estamos tan pendiente de su agenda, porque nosotros no tenemos una agenda propia, y solo actuamos en la medida en que le vemos las orejas al lobo y nos sentimos amenazados.


Si s贸lo actuamos de forma reactiva, estamos entonces siguiendo paso a paso lo que ellos quieren que hagamos, secuestrando nuestro tiempo y nuestra voluntad, dedic谩ndosela a ellos: esto es parasitaci贸n arc贸ntica, y adem谩s consentida en toda regla. Nos colocamos a nosotros mismos de esta manera, en una posici贸n de perdedor que tiene que remontar, condicionados a la informaci贸n que nos quieran dar, reaccionando cu谩n perros de Pavlov, a est铆mulos concretos mediante aprendizaje condicionado.

No creo que esa sea nuestra funci贸n principal, si nos consideramos despiertos o almas ayudantes ¿verdad? Debemos conocer al enemigo, pero jam谩s vivir en funci贸n de sus patrones jerarqu铆as y esquemas. Esto es algo que veo constantemente: vivimos tan pendientes de las amenazas, qu茅 condicionamos nuestro tiempo y nuestra mente, o sea todo lo que tenemos, a buscar la manera de evitar sus aros, cuando lo inteligente ser铆a construir nuestro propio camino individual.

Es tan f谩cil acogerse al rol de v铆ctima sin darse cuenta, y nos lo ponen tan a huevo con tal de que aceptemos esa posici贸n, que aunque sepamos qu茅 est谩 pasando en realidad, nos quedamos esperando a ver cu谩l es su siguiente paso, para volver a reaccionar en base a ello. Creo que es hora de aceptar la idea, de que estamos aqu铆 pero no somos de aqu铆 y ahora te explicar茅, por qu茅 esto es tan importante de cara a explorar y reconocer nuestra libertad individual.

NO ES ADN BASURA, ES ADN DURMIENTE


Los propios cient铆ficos llaman a gran parte de nuestro ADN, ADN basura por el mero hecho de que no tiene una funci贸n visible o demostrable. y sin embargo ah铆 est谩. Si algo nos ha dejado claro la naturaleza, es que nada es porque s铆 y todo cumple su funci贸n. De ah铆 que la idea de que nuestra propia g茅nesis como seres humanos, haya sido completamente artificial y en laboratorio, cobra mucha m谩s fuerza que la mera casualidad evolutiva.


Si somos fruto de una panspermia dirigida, esa gran parte de nuestro ADN cuya funci贸n desconocemos y que sin embargo se encuentra presente, y no desaparece generaci贸n tras generaci贸n, ha de tener una funci贸n latente. La presencia de este ADN se justificar铆a en otras condiciones en el medio, para el que fue dise帽ado o evolucionado.

Cuando la teor铆a de la evoluci贸n dir铆a precisamente, que lo que no es funcional deja de tener continuidad, la persistencia de ese ADN implica por tanto, que esas condiciones se dan y existen en alguna parte, o que se han dado y han existido. Si este ADN llamado "basura" no desaparece, la explicaci贸n cient铆fica es que ha de tener una funci贸n.

Debemos tener en cuenta, que no hablamos de una mol茅cula sencilla, cuya funci贸n es almacenar c贸digo y trabajar en su replicaci贸n. El ADN est谩 presente porque c贸mo mol茅cula inteligente, se corresponde no solamente con el individuo y sus predecesores, sino que en un alto porcentaje tambi茅n corresponde a las variaciones en el medio y el entorno.

EL ADN NOS DEMUESTRA QUE ESTO ES UNA C脕RCEL


La presencia de ese ADN no tiene sentido desde un punto de vista de eficiencia evolutiva, por lo que: o alguien lo ha puesto ah铆 en un dise帽o de laboratorio, o bien nos han puesto a nosotros desde donde vengamos, aqu铆, en una h谩bitat que nos restringe las funcionalidades y capacidad del ADN.


Y si alguien nos ha puesto aqu铆, para vivir por debajo de nuestras capacidades o dise帽o original, es: o porque se nos est谩 cultivando a modo de granja o experimento; o bien porque no se pudieron mantener las condiciones originales del entorno original, en el que fuimos desarrollados, y se los ha ubicado aqu铆 para preservarnos. Afinando todas las posibilidades nos podr铆an quedar tres situaciones:
  • Esto es una gigantesca placa de Petri y nosotros somos el cultivo.
  • Esto es una Granja Prisi贸n y nosotros somos el ganado.
  • Este es un planeta de asilo y nosotros somos los refugiados.
Cualquiera de estas tres opciones, explicar铆a el porqu茅 no siendo de aqu铆, estamos aqu铆. Y el porque gran parte del volumen de nuestro ADN, es absolutamente desconocido al menos de forma p煤blica seg煤n la ciencia oficial, cuando ning煤n organismo conocido, replica su genoma generaci贸n tras generaci贸n, sin que 茅sta tenga un sentido y una funcionalidad concreta.

CUANDO TE HACES CONSCIENTE, TU PERSPECTIVA CAMBIA


Te das cuenta, que no todo gira en torno a la econom铆a o a la pol铆tica, que se trata de un aut茅ntico problema de supervivencia. Conocer el verdadero juego, del cual con total seguridad somos parte interesada, ya sea como ganado, como mano de obra, como chivo expiatorio del sacrificio, o simplemente como resultado de un experimento. S铆... ya lo s茅, y aparte de todo eso hay que pagar el alquiler. Te aseguro que no se me olvida, es parte de mi realidad.


No somos v铆ctimas. Una vez que ya somos conscientes en mayor o menor medida de lo que somos, ya no le podemos echar la culpa a nadie sobre reaccionar o quedarnos quietos. No podemos depositar m谩s que en nosotros mismos la responsabilidad de creer y actuar. Aunque lo m谩s dif铆cil de todo, quiz谩s sea no actuar. Deber铆a decir mejor la responsabilidad de vivir, seg煤n nuestras propias normas o las impuestas.

Si me hablas de la gravedad, espacio y tiempo, obviamente tenemos que acatarlas. A menos que alguno de nosotros tenga el dominio de cambiar de realidad dimensional, nos toca acatar las mismas reglas. Una cosa es el entorno, que es relativamente insalvable y otra muy distinta, son las normas impuestas por la jerarqu铆a arc贸ntica, consistentes b谩sicamente en miedo, deuda y relaci贸n dominaci贸n-sumisi贸n.

De momento la gravedad no podemos evitarla, por m谩s simulaci贸n compartida en la que vivamos, pero someternos o no someternos sigue siendo una opci贸n que depende 煤nica y exclusivamente de nuestro libre albedr铆o. Parece que el mundo se termina si no seguimos 贸rdenes, pero la realidad nos demuestra que simplemente no sabemos qu茅 es lo que pasa, porque nunca antes nos hemos atrevido.

Su triunfo es mantenernos a raya con el miedo. Nuestro triunfo es seguir nuestros propios objetivos y vivir al margen de sus planes. Habr谩 cosas que no podamos salvar o evitar, pero si empezamos a ejercitar el libre albedr铆o, y a decir que s铆 o que no activamente, la vida cambia y mucho.

Somos antih茅roes en un mundo que ha dejado de creer en los hombres buenos.

Comentarios

LO M脕S LE脥DO 馃攷