LA RUEDA DEL SAMSARA

It is no measure of health to be well adjusted to a profoundly sick society.

― Jiddu Krishnamurti

El todo no se puede entender desde un solo punto de vista, que es lo que intentan hacer los gobiernos, las religiones organizadas y los partidos autoritarios. Solo si escuchamos podremos aprender. Y escuchar es un acto de silencio; solo una mente serena pero extraordinariamente activa puede aprender. La religión de todos los hombres debe ser la de creer en sí mismos. Estas palabras corresponden al pensador hindú Jiddu Krishnamurti.

ESTAMOS AQUÍ PERO NO SOMOS DE AQUÍ

Estamos aquí pero no somos de aquí. Creemos que sí pero no es así. Y no es que nos hayan plantado y abandonado a nuestra suerte, es más bien todo lo contrario. Estamos aquí para servir de alimento, somos el pasto de los poderosos, aunque eso ya lo sabes. Lo que quizás no sepas, es que esto se remonta a mucho antes de nuestra propia existencia. Y los verdaderos poderosos, no son como crees que son.

El dinero, el sexo y el poder, son los ganchos que nos han puesto delante, para que estemos entretenidos en este laberinto cerrado. Un laberinto de fatiga y lucha constante entre nuestros semejantes, en el que nos los han puesto como meta. Objetivos visibles y limitados, para que juguemos un simulacro: un ensayo a escala reducida, e imitemos los juegos de poder de nuestros creadores, con el único fin de observar y medir nuestra adaptación, en función de alimentarse energéticamente de nuestras confrontaciones, nuestros miedos y nuestros deseos.

La dominación y el poder sobre el adversario, son el simulador en el que nos han introducido dentro de este laboratorio granja, para que a través de nuestros ciclos vitales, se desprendan nuestras vibraciones, que son lo que realmente les alimentan. Para nosotros el fin o el objetivo es algo limitado, computable y medibles. Mientras que para ellos, el fin es alimentarse del proceso.

Son las élites que nos gobiernan, escondidas tras las corporaciones y los gobiernos, los delegados terrestres de unas entidades más antiguas, grandes y poderosas, que cualquier otro ser vivo que haya nacido, crecido, alimentado, reproducido o extinguido, a lo largo de toda la historia biológica, que se haya desarrollado en nuestra biosfera. Ni siquiera estas élites aparentemente invisibles, son la cima definitiva. Son meros guardianes y capataces de esta granja, en la que a cambio de más poder, estatus y conocimiento que el resto de nosotros, nos apacientan para que sigamos generando los ciclos vitales, que alimentan realmente a estas entidades.

Desde esta perspectiva, es mucho más fácil responder al reclamo existencial del por que estamos aquí y cuál es el sentido de nuestra vida. Fácil: alimentar a aquellos que nos han ubicado aquí. ¿Y el patrón bíblico de a su imagen y semejanza? En efecto ninguna criatura con capacidad de crear, es capaz de crear algo superior a sí misma. Nos han limitado de fábrica, de forma que no veamos más allá.

LA RUEDA DEL SAMSARA

Somos el producto materializado, de la idea de un demiurgo que no nos amó cuando nos creó como nos han contado, sino que más bien nos materializó, para garantizarse ganado al que dominar y conducir a su antojo.

No solamente durante la vida, sino también después de la muerte. Haciendo todo lo posible, para que nos eternicemos ciclo tras ciclo, en una rueda de culpa, que nos haga volver una y otra vez, a repetir una vida tras otra, intercambiando roles, con el único supuesto fin de... ¿alcanzar la perfección? Nuestros ciclos y lo que sufrimos dentro de esta cárcel o granja planetaria, es lo que les alimenta. Por eso no quieren que salgamos de la rueda. Por eso nos dieron religiones para programarnos.

Un día, hace ya tanto tiempo que no recuerdas, firmaste un contrato para estar aquí. ¿Crees que esta vida no te corresponde? ¿este trabajo? ¿estas experiencias? Fuiste tú mismo el que mucho antes de tener tu consciencia actual, aceptaste estas condiciones para estar aquí, incluso para regresar. Tu memoria fue borrada, para que no partieras con ventaja a tu regreso, y así evitar que eligieras ir a la fuente primigenia original, en lugar de caer una vez tras otra en los límites que garantizan las vibraciones vitales que alimentan a estas entidades.

NUESTROS CROMOSOMAS NOS DEMUESTRAN QUE NO FUIMOS UNA CASUALIDAD

Nos puede costar procesar esto. Podemos desechar esta alternativa y aferrarnos al guion social, mundial, civil y biológico conocido y estudiado. Pero ni siquiera la ciencia tal y como la concebimos actualmente, en toda su potencia es capaz de responder a ciertas preguntas que se plantean en nuestros cromosomas.

Aunque fuéramos meros animales sin alma ni espíritu, hay preguntas a nivel cromosómico y evolutivo, que la genética es incapaz de responder. Nuestros cromosomas, no encajan con una deriva evolutiva directa del primate, sin que hubiera existido una intervención externa y consciente, entre los cromosomas 2 y 3.

Tú y yo estamos en guerra mucho antes de que ninguno de los dos existiera. Y si, esta frase la he robado de la película Terminator Salvation ¿OK? Pero no por ello deja de tener un significado auténtico: tú y yo estamos en guerra, pero no el uno contra el otro. Quieren que así sea porque ese es su alimento y su satisfacción, es lo que les da poder, que tú y yo estemos divididos. Pero nuestra verdadera guerra es otra muy distinta es subyacente: es ese mismo sentimiento que tenía Neo antes de despertarse de la Matrix: hay algo en elmundo que no funciona.

Ni si quiera somos una primera versión, y no sabemos si seremos la última: el caso es que nos creemos dueños del planeta. A los verdaderos dueños del planeta no les vamos a ver la cara, a menos que un día decidan exponerse. Aunque las veces que históricamente se han manifestado, lo han hecho a través de fenómenos naturales, cósmicos o planetarios… y nosotros no hemos salido precisamente bien parados. O mejor dicho: experimentos anteriores a nosotros.

En otras ocasiones, han utilizado avatares, que se nos han mostrado cómo personajes históricos de gran relevancia, sin que podamos asegurar con absoluta certeza, si realmente estábamos ante un ser humano, o un delegado de esta élite. Personas extraordinarias, que han iniciado movimientos, fundado religiones, o héroes históricos verdaderos.

LAS LÍNEAS DE SANGRE QUE OSTENTAN EL PODER

Una manera bastante contundente para saber si estamos hablando solamente de conjeturas, locuras o casualidades, es revisar los árboles genealógicos de los poderosos y comprobar, que todos ellos están relacionados.

Personajes que están emparentados entre sí, como George Bush Jr. el que fue presidente de los Estados Unidos, hijo del que fue director de la CIA George Bush Sr. y primo doceavo de la reina Isabel II y descendiente del rey Eduardo I. ¿Y qué pasa con Obama? pues sucede que aun siendo afroamericano, es pariente de George Bush… sí, George Bush es primo décimo de Obama ¿cómo lo ves? Obama tiene como primo sexto al que fue también vicepresidente de Bush, Dick Cheney y a los expresidentes Gerald Ford, Lyndon Johnson, Harry Truman y James Madison... y también, el que fue el primer ministro británico Sir Winston Churchill. Obama, es también primo noveno del actor Brad Pitt.

La que fue esposa de Brad Pitt, Angelina Jolie que es a su vez es prima de Hillary Clinton en noveno grado. Cuando era más joven se grabaron declaraciones suyas, en las que admite haber participado en rituales y habla de una orden secreta. Madonna quien es también prima lejana de Hillary Clinton... todos están emparentados y esto está evidenciado por el estudio llevado a cabo por la New England Historic Genealogical Society (fundada en 1845, es la entidad genealógica más antigua de los EE. UU.) quién debió flipar cuándo descubrió que todos eran familia. Hillary Clinton está emparentada también con Alanis Morrisette, Camila Parker Bowles y Céline Dion. Céline Dion a su vez comparte consanguinidad con el cantante Justin Bieber.

NO SE SALVA NADIE

Y por último los más importantes, pero no tan populares, las dinastías Rockefeller y Rothschild, que al fin y al cabo son los que verdaderamente controlan todas las finanzas internacionales, y están también emparentados con muchos de los personajes citados anteriormente.

Cantantes, empresarios, actores, políticos y líderes mundiales: de cualquier ámbito, signo político e ideología, resulta que a lo mejor y solo a lo mejor, no ha llegado al éxito como fruto de su esfuerzo, sino que ya estaban elegidos probablemente desde antes de nacer. Un linaje de sangre que emparenta a los poderosos. Todos los que te he citado, están metidos en el ajo.

No me he vuelto loco de un día para otro. Tampoco pretendo convencerte de nada, pero siento que los esquemas dictados por muy disidentes que resulten, se me han quedado excesivamente cortos. Lo único que pretendo, es que no te creas absolutamente nada, de quien afirme tener la solución, la respuesta, la verdad o el dogma.

No les importamos una mierda, nos ven como ganado. La diferencia entre ellos y nosotros, es que tenemos alma, y precisamente por eso, quieren hacer tanto hincapié en que la entreguemos a una religión, a una causa, a una ideología o la versión contraria: que creamos que no tenemos alma, y que no hay nada después, para que de forma, puedan consumirnos a su capricho. Terminaré con otra cita del autor J. Krishnamurti: Solo puedes tener miedo de lo que crees saber.

Somos antihéroes en un mundo que ha dejado de creer en los hombres buenos.