10 ERRORES QUE UN HOMBRE NO DEBE COMETER 💀

Beware the beast Man, for he is the Devil's pawn. Alone among God's primates, he kills for sport, or lust or greed. Yea, he will murder his brother to possess his brother's land. Let him not breed in great numbers, for he will make a desert of his home and yours. Shun him. Drive him back into his jungle liar, for he is the harbinger of death.

― Cornelius, Planet of the Apes

Te voy a contar una serie de cosas que deberías saber por tu propia supervivencia y que además, te pueden ser exigidas o están bien vistas socialmente aunque te perjudiquen. Algunas las entenderás a la primera, mientras otras verás que ya es demasiado tarde para volver atrás. Lo más importante de todo, es que te quedes con la canción aprendida; ya que estás acostumbrado a creerte todo lo que te dicen como un borreguito, pues esta vez al menos… créete algo que te puede beneficiar y evitarte más de un quebradero de cabeza. Allá vamos con la lista de 10 cosas, que bajo ningún concepto un hombre debe hacer o aceptar jamás:

1. ACOSTARSE CON UNA MUJER SOLO PORQUE ELLA QUIERE

Vamos al grano ¿sabes por qué empiezo precisamente por aquí? Porque el 99% de tus problemas, están originados por pensar con la entrepierna. Y lo que desde una mentalidad absoluta de escasez, tú lo ves como una oportunidad de tener sexo, puede convertirse en una falta creciente de iniciativa y actitud. Quiero que pienses en la última vez que tú tomaste la iniciativa ¿te acuerdas? Bueno, para que te acuerdes, esto ha tenido que pasar alguna vez. Si no es así, no sabes ni de lo que te estoy hablando, y solo has tenido sexo con mujeres a las que les ha venido bien tenerte disponible. 

El problema que tienes aquí, porque de hecho lo tienes, es que no controlas ni has tenido control alguno sobre tu vida sexual. Y esperas a que tenga que venir alguna a sacarte de la sequía. Puede que hayas tenido alguna buena racha, pero como en tu vida has sido capaz de dar un primer paso, bailas a merced de la última en llegar, para que sea ella la que tenga que ponértelo en bandeja. Eres algo así como un pene envasado al vacío, al que guardan en el frigorífico, solo para calentar y consumir. ¿Te conformas con que te usen cuando les vaya bien y además te consideras afortunado por ello? Así te va.

2. SENTIRTE RESPONSABLE DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS DE UNA MUJER

Si eres de lo que no tienen la suficiente autoestima para quererse un mínimo, es probable que te creas el causante de los malestares emocionales de la mujer que tengas más cerca. Y que además de eso, los asumas como culpable y no siendo suficiente, hagas cosas por compensarlos y enmendarlos para tener tu conciencia tranquila. Pues querido compañero, voy a abrirte los ojos: que sepas que te están haciendo chantaje emocional. Y lo peor de todo, es que te lo están haciendo porque les funciona. Como ven que enseguida te pones nervioso, y haces por dar más y ceder para compensar y “dejar las cosas bien”, eres una auténtica mina de bienes, servicios y ventajas. El drama no pesa en Kilos.

Probablemente tienes fama de ser buena gente y bajo ningún concepto, quieres que nadie esté mal a tu alrededor ¿verdad? ¡qué bueno eres! Pues estás dejando que jueguen contigo: así de claro te lo digo. Porque eres capaz de todo, con tal de no disgustar a las personas de tu circulo social, y en especial a la mujer que te gusta o a la que amas. Ella lo sabe, por que sí… lo sabe y lo utiliza contigo porque sabe que así puede sacarte lo que quiera. Volver atrás es complicado y quizás si dejas de ceder, la relación puede terminarse, pero te pregunto ¿de verdad es eso una relación?

3. IMPLICARTE CON LA MUJER QUE HA CORNEADO A SU PAREJA CONTIGO

Puedes llegar a sentirte un conquistador por quitarle la novia a otro. Hay tipos que esto lo consideran algo así como ganar una competición y quedarse con el trofeo, sobre todo si la mujer es muy atractiva. Puedes llegar a pensar, que esto te coloca en una especie de posición ganadora, y que has demostrado ser mejor que otro, ya que ella finalmente ha decidido quedarse contigo. Puedes llegar a creer, que está bien ser "el otro" por un tiempo, mientras que al final de la película te quedes con la chica ¿verdad? Pero espera, piensa un poco…

Si te quedas con la moraleja, te darás cuenta de que ahora estás con la mujer equivocada. A pesar de que te pongas en plan romántico y lo quieras pintar como un triunfo del amor, solo tienes que ver que ahora mismo, puedes estar ocupando un puesto perecedero. Tan caduco como el anterior ¿de verdad crees que es la primera vez? Te están diciendo que eres reemplazable y no lo pillas. Nadie es insustituible, pero mira cómo ha tratado a su pareja. Ahora ese mismo tío, eres tú. Así que mientras dure y hasta el siguiente, disfruta del momento: tú lo has querido.

4. ESTAR CON UNA MUJER QUE SOLO QUIERE TU DINERO

Hay tíos que aceptan este juego. No solo lo aceptan, sino que son ellos mismos quienes lo comienzan y lo buscan, poniendo por delante su estatus antes que así mismos. Lo dan por bueno para comprar tiempo, compañía, sexo y rodearse de lo que entienden como bueno, porque para eso lo pagan. Cuando pones por delante de ti lo que tienes, estás haciendo que te vean por esa bandera: no esperes que te quieran, ni que te respeten, ni que sientan algo por ti. Y mucho menos, poder confiar en alguien.

Estás comprando tiempo, solamente eso. Y quien está contigo, no está contigo: está por tu casa, por tu coche, por tu trabajo, o por lo que sea que estés vendiendo. Eres un proveedor puro y duro, nada más. Probablemente creerás que es tuya porque has pagado por ella, pero seguro que no tardas en darte cuenta, que cuando pagas, siempre hay alguien que es capaz de pagar más, o lo que es peor para ti: alguien que da algo que tu no eres capaz de dar. Y ahí, se terminó la historia.

5. DAR EXPLICACIONES A TU PAREJA ACERCA DE COMO TE SIENTES

Imagina que tuvieras un botón de autodestrucción escondido. En plan botón rojo atómico, como de película ochentera con la Guerra Fría de fondo. Quien tenga acceso al botón rojo, tiene el poder de destruirlo todo. Pues bien, a ti un mal día te da un arranque de confesiones; sí… uno de esos días en lo que de repente estás blando y sientes la necesidad de abrirte. ¿Y que hacemos los tíos cuando nos abrimos? Aparte de cagarla y mucho, dejarla entrar hasta la cocina ¿qué digo hasta la cocina? ¡hasta las entrañas! Si, a ella ¿a quién si no? Te suena aquello de por la boca muere el pez ¿verdad? Pues ahí lo llevas.

Le dices donde está tu botón rojo atómico, y de pronto: 3,2,1… sientes un alivio tremendo. Es como si te hubieras quitado un peso de encima, un yunque, una lápida y una plancha todo junto a la vez. Está bien eso de confiar en la mujer que amas y abrirte emocionalmente: es lo mejor del mundo ¿a que sí? Pues en un rincón de sus otras entrañas, las que ella nunca te ha mostrado, ni te mostrará, está el Dr. Claw acariciando al gato delante su monitor, mientras te observa la cagada que acabas de hacer. Tú acabas de dar la llave de tu debilidad haciéndote 100% transparente, y le acabas de entregar el poder para manejarte a placer. Es cuestión de tiempo, que necesite emplear ese botón, por la razón que sea, que puedes estar seguro que lo hará. Las armas nucleares son peligrosas hasta cuando no se lanzan: sirven para intimidar y amenazar al enemigo. Ya sabes, Guerra Fría.

6. CONSENTIR LA PRIMERA FALTA DE RESPETO

Te das cuenta de que no hablo de faltas de respeto en general ¿verdad? Hablo de la primera de todas, la del minuto cero. Sí, aquella vez que te soltó eso de ¿pero tú eres tonto? O cuando te cambió el nombre, o cuando agarró un berrinche y empezó a pegar gritos y tú lo dejaste pasar. Te callaste y seguiste, en lugar de haberte largado sin decir palabra, que era lo que tenías que haber hecho. Nada de entrar al trapo, ni alimentar la discusión: te tenías que haber largado, y si ella quería remontar la situación, la pelota hubiera estado en su tejado y hubiera tenido que aprender que para estar contigo, las faltas de respeto tienen que ser igual a cero.

Pero en lugar de eso, lo dejaste pasar. Y como lo dejaste pasar, te llama o te trata de tonto cuando le viene a la boca, te contesta mal y pega voces cuando le apetece, porque sabe que tú eso lo aguantas… y más que lo vas a aguantar, si quieres que siga habiendo “relación”. El minuto cero es el más importante de todos, y tú decidiste callarte y quedarte, haciendo ver que aceptas ese tipo de comportamiento. 

7. ASUMIR LA CULPA UNIVERSAL EN LA RELACIÓN

Si estás casado, muy probablemente este es tu pan de cada día (y ojalá me equivoque). Dime una cosa solo de la que no te hagan responsable en casa, negativamente hablando. Una solo, con esa me conformo. ¿Siempre te equivocas tú? Y si no es así ¿por qué siempre te vuelven las culpas? ¿No te has dado cuenta, de que cada vez que no te cuadra algo y pides explicaciones, acabas discutiendo por otra cosa totalmente diferente y que siempre por sistema cae en tu tejado? Espero que no te quedes sin trabajo, en serio.

Según la RAE, el reproche es la atribución a alguien de las consecuencias de una acción dañosa o ilegal, mediante la exigencia de responsabilidad civil o penal. Aunque te hablo de algo más de andar por casa, me gustaría saber, o mejor dicho: confirmar, sobre quién caen las consecuencias de lo que pueda pasar entre cuatro paredes, estando en pareja ¿sobre ti o sobre ella? Me da que no me lo tengo que pensar mucho. Y tú lo aceptas y lo das por bueno, porque eres el hombre ¿verdad? 

8. DEJAR A LA VOLUNTAD DE TU PAREJA TU SITUACIÓN LEGAL Y ECONÓMICA

Echa una firmita aquí y otra acá; pero espera ¿cómo que separación de bienes? ¿acaso no confías en la relación? ¿cómo que no quieres poner una cuenta común? Vaya, vaya… lo tuyo es suyo, y lo suyo es más suyo que nunca. Ojo, que para eso se lo ha ganado ¿verdad? Pero en cambio tú, no puedes renunciar a trabajar, o tener menos horas. Permíteme que te diga, que en pareja tu situación legal y económica, gracias a las leyes asimétricas que nos han impuesto, tu estatus legal, social y económico, depende casi exclusivamente, de que tu pareja “tenga un buen día”.

Menos mal que hay confianza ¿eh? Si no… si no, dime tú ahora mismo, donde estarías si a ella por la razón que sea, se le cruzan los cables, y el viernes cuando salgas del trabajo, te encuentras con una demanda de divorcio y una denuncia falsa. Sí, una denuncia de esas que dicen que no existen, pero que parecen que solamente sirven, para encerrar a maridos los fines de semana en el calabozo, hasta que la casa se quede limpia y las cuentas bancarias vacías. Me pongo a pensar en todo lo que hayas firmado con el banco, y se me hiela la sangre.

9. VALIDAR EL COMPORTAMIENTO DE UNA MUJER, SOLO PORQUE ES MUJER

Si lo dice ella va a misa: tiene razón y punto, o como nos decía una ministra hace poco, hay que creerla sí o sí. Pues si das esto por bueno, mucho me temo que es cuestión de tiempo que ni si quiera, tengas derecho a hablar o a expresarte. Y si lo haces, va a dar igual porque lo que ella diga, va a pesar más que cualquier cosa que tu puedas alegar o demostrar. Incluso aunque los dos digáis y hagáis lo mismo, tú vas a ser juzgado con un rasero y a ella, tanto para bien como para mal, se la va a animar a fomentar lo que le venga en gana, porque ¡oye! que es una mujer… Bienvenido al universo dogmático de Hillary Clinton.

10. ACEPTAR HIJOS DE OTRO HOMBRE EN UNA RELACIÓN

Lo primero que te voy a preguntar es ¿qué estás haciendo ahí? Y lo segundo, de forma bastante más tajante, es ¿qué sales ganando con esto San José? Vaya hombre, los sensibles empiezan a alarmarse. Y todo porque estoy diciendo, que a ninguno de nosotros, nos corresponde ni el cuidado, ni la manutención, ni la educación, ni el soporte familiar o afectivo de los hijos de otro. En todo caso, de los nuestros; que además parece que solo son nuestros en la faceta económica, porque después legalmente, ella tiene todos los derechos de cara a la protección de los hijos, y tú solo tienes derecho a pagar y a pagar.

Entonces, dime: si quieres tener pareja ¿por qué no te echas una novia de verdad y dejas de pretender defender lo indefendible? Puedes tener una cosa bien clara, para una madre, lo más importante son sus hijos. Y si tú no eres el padre de esos hijos, la balanza desde el principio se encuentra descompensada. Yo entiendo que la puedas querer, que te puedas enamorar… ¡lo que tú queras! pero “hacer de…” La experiencia me dice que con una madre soltera, el último de la casa es el novio, o sea tú, porque hasta el perro va antes. Tú en ese hogar, que tampoco es tuyo, eres solamente un instrumento de conveniencia, soporte y manutención. Una mera herramienta. Y por mucho que quieras a esos niños, no son tuyos ni lo serán nunca. Repito: no son tuyos, y en esa casa no pintas nada.

Si has llegado hasta el final, enhorabuena: allá tú con tu libertad.

Somos antihéroes en un mundo que ha dejado de creer en los hombres buenos.