ELLA NO ES LA EXCEPCIÓN: APRENDE A DECIR “NO” ☎️

Ava: I've never met anyone new before. Only Nathan.
Caleb: Then I guess we're both in quite a similar position.
Ava: Haven't you met lots of new people before?
Caleb: None like you.

― Ava & Caleb, Ex Machina

Hoy vamos a hablar de amor, aunque no te lo parezca en un principio. Y para empezar, en lugar de darte una lección, te diré que yo mismo tengo que aprender algo importante: es algo que sé, algo que tengo muy cerciorado y que además, no me cuesta entender porque siempre se cumple. Ojo, que de momento no me refiero a decir que NO, eso sé hacerlo bien, y además se hacerlo a tiempo. Lo que debo aprender por encima de cualquier cosa, es a no hacer excepciones. Pero ¿por qué? Ahora viene lo bueno…


De todas las mujeres que hayan pasado por tu vida, algunas te habrán importado mucho, esas son las que te han marcado: para bien o para mal dejaron una huella. Otras, simplemente te habrán venido bien: habrán estado en el lugar oportuno en el momento oportuno, y te lo hicieron cómodo. Podemos decir, que tuviste suerte ¿por qué no? También se puede tener suerte, y hay mujeres excepcionales que te encuentras cuando no las buscas.


Después, habrá otras que olvidaste rápido: puede que haya habido alguna que parecía que iba a ser muy importante… y su efecto de un día para otro, se esfumó como la espuma. Eso también pasa y no es ni bueno ni malo, simplemente pasa y no es culpa de nadie. También las habrá habido que te hayan resultado indiferentes, o que incluso te hayan generado repulsión o rechazo, es probable que no pasaran de la primera cita, o que pidieras la cuenta a los 10 minutos de estar sentado con ellas. A mí me ha pasado: a veces quedar mal en una primera cita, es lo mejor que te puede pasar.

Ahora me gustaría, que pensaras en las que te han marcado, y que trataras de verlo desde fuera; como si fueras yo, o como si fuera otra persona en la que confiaras, como por ejemplo un buen amigo, el que hubiera estado observando el escenario en silencio, mientras tú actuabas en esa obra teatral llamada cortejo, relación, amistad con derecho, matrimonio, amor no correspondido, fracaso estrepitoso o lo que fuera. Intenta por un momento no ser tú mismo, para verte desde fuera. 


Lo primero: si ella te marcó, fue porque no la veías igual que a las demás ¿me equivoco? Si conforme vamos hablando, digo algo que no te cuadre… puedes obviarlo, aunque lo dudo. Sigamos: si a ella no la veías igual que a las demás, pues obviamente no la vas a tratar igual que a las demás. Y como ella no era como las demás, sus respuestas, sus actos y sus reacciones, no pasaban por el mismo filtro.

Mientras te hablo, me vienen flashbacks y recuerdos… y me estoy cagando en todo ¿sabes por qué? Porque si sus respuestas no pasan el mismo filtro, mal vamos. Eso quiere decir que tanto una respuesta positiva, como una negativa, la forma que tengamos de verlo va a estar distorsionada ¿me sigues? Dicho de forma sencilla, algo bueno o normal, va a tener sobre nosotros un impacto mucho más positivo del habitual, y quizás una falta de respeto o una negativa, al no pasar el mismo filtro porque ella nos importa, me temo que podamos hasta justificarlo, justificándola a ella y a su inmaculada imagen. Mal, mal y mil veces mal.  

Cuando separas a una mujer del resto, hasta la lista de la compra o un recado apuntado en un papel, o una simple nota, te parece una carta de amor. Una simple respuesta al whatsapp, parece “una señal” y un simple sí, parece la salvación eterna. Cualquier cosa te ilusiona, te incentiva, te anima y te da vidilla ¿verdad? Ahora me preguntarás ¿y esto está mal? Pues no… y sí. Porque si lo ves desde fuera, te irás dando cuenta, que ella no está haciendo nada especial. Nada de nada, y tú lo estás maximizando todo, o minimizándolo, si no te conviene ver la realidad. En efecto eres tú el que está en el bote: ella no tiene que hacer nada, y tú eres el que ajusta el escenario para que ella siga siendo la diosa de la perfección.


Es por eso por lo que tienes que aprender a decir que NO. Pero este “no” es una negativa distinta, porque no se trata de que le niegues nada a ella; no voy por ahí. Ese NO es para ti, es para mí también ¿cómo? Repite conmigo: ella NO es diferente a las demás. Si la ves diferente a las demás, es porque tiene más cartas que tú, al menos una. Y si ella tiene una carta más que tú, es porque previamente tú la has dejado ver, se la has regalado y ella ya sabe sobre qué tablero está jugando. Y tú, querido amigo has renunciado, o depositado en ella la carga de la acción y la iniciativa. Por eso, ella es especial y es diferente a las demás, no porque ella haya nacido con ese título, si no porque tú la has hecho así.

Así que repite conmigo: ella NO es diferente, ella NO es especial. Ya verás como te empiezan a ir mucho mejor las cosas.

Comentarios

  1. Toda la razón hermano. Por eso a día de hoy cada vez que una mujer me dice, "es que yo soy única"(cosa que se empeñan en no dejar de repetir, sobretodo cuando saben que tienes un valor superior al de ellas), no puedo evitar mirarlas a los ojos con una media sonrisa, con la sapiencia de que no es así, ni mucho menos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. no fuerces, mira donde tengas que mirar... te tiene que dar igual

      Eliminar

Publicar un comentario

El mundo no va a cambiar por lo que vayas a decir ahora, créeme... pero si crees que merece la pena y debes decirlo ¡adelante! Es tu decisión.

LO MÁS LEÍDO 🔎