UNA SOBREDOSIS DE PILDORA ROJA 💊
This is your last chance. After this, there is no turning back. You take the blue pill - the story ends, you wake up in your bed and believe whatever you want to believe. You take the red pill - you stay in Wonderland and I show you how deep the rabbit-hole goes.
— Morpheus, The Matrix
Desde que Neo se tragó la píldora roja y se le abrieron los ojos, han pasado muchas cosas en el mundo; pero ninguna tan decisiva como para decir que el mundo ha cambiado. Muchos creerán que sí, pero la píldora roja lo único que ha hecho ha sido abrirnos los ojos, a cosas que han estado siempre ahí y que por una razón u otra, nunca antes habíamos sido capaces de percibir, ver o aceptar.
Una vez que has abierto los ojos, puedes ver, oler, oír, sentir y probar, pero tú sigues siendo tú. Lo único que ha cambiado, es que ha desaparecido el velo que nublaba tu percepción. Ahora ya sabes que lo que antes te sabía a pollo, quizás solo sea un batido de proteínas. Descubres que el amor no es para siempre, descubres que solo eres un número en la empresa para la que trabajas, descubres que solo te quieren por lo que tienes y no por lo que eres, que el mundo sigue divido entre explotadores y explotados, y que sin un físico atractivo no eres nadie. Vale ¿y ahora qué?
Hay una píldora roja para cada realidad o verdad establecida, para cada creencia, para cada cultura y cada idea. No hay una única píldora roja, que te abra los ojos para todo, como se los abrió a Adán tras comer el fruto del árbol prohibido en el Paraíso. Nadie dijo nunca que fuese una manzana roja, simplemente alguien lo pintó en un cuadro, y todos lo dimos por hecho. Con este símil, quiero que entiendas que lo que ahora llaman píldora roja, no es más que la revelación de la realidad en si misma, de forma objetiva, real y tridimensional, obviando el drama, la teoría o la ideología que rodee al hecho en cuestión.
Nada nuevo hay bajo el sol, porque la píldora roja siempre ha estado ahí, porque representa los hechos tal y como son. The Matrix, puede representar la percepción individual de cada uno; y la píldora roja, representa el hecho sin subjetividad, sin opinión, sin creencia o sin emoción. Diríamos que es lo que hay. Punto. Yo ya llevo un atracón de píldoras rojas considerable, podría decir que tengo sobredosis y a pesar de todo, sigo siendo la misma persona.
Y si eres mínimamente inteligente, o crítico, te darás cuenta que la píldora roja, realmente no cambia nada en el mundo, tampoco te cambia a ti: solamente te abre a la puerta a la realidad, pero no puede decirte quién eres. La píldora azul lo pretende, sí… la de los cobardes amantes de la seguridad de un plan preestablecido: te da un sustitutivo, un placebo, un camino dictado, un guion que seguir. Hasta los que se hacen llamar antisistema cumplen su función dentro de The Matrix, están previstos en la ecuación. Si le quitas el drama a toda la narrativa, it’s not a big deal.
Sin dramas, la realidad era y es, la que Morfeo le enseñaba a Neo enseñándole una pila Duracell, porque eso es lo que somos: una fuente de energía a explotar. Eso es lo que somos, la única opción que tenemos es elegir donde invertimos y a qué destinamos esa energía. Lo que los administradores de Matrix no quieren que veas, es que eres tú el que elige qué hacer con esa fuente de poder. Porque no te engañes: seguimos siendo pilas Duracell aun después de haber tomado la píldora roja. Eso no cambia. En este mundo nos explotamos unos a otros, y todas las contradicciones sociales a las que se nos somete, pretenden ocultarlo para sostener el sistema, ocultando nuestra verdadera naturaleza animal.
Ahora la píldora roja también “se vende”. Puedes decir que este un lugar #redpill si tienes la necesidad de clasificarlo, pero la verdad es que me da bastante igual. Todo bajo la marca redpill, se supone que está hecho para abrirnos los ojos, y por un lado está bien, porque eso quiere decir que no toda la gente es tonta, o que al menos existe un deseo en una minoría cada vez menos minoría, de no comulgar con lo que nos dan por bueno. No deja de ser un intento de hackear la realidad, suponiendo que haya una forma de hacerlo; pero dudo mucho que el verdadero poder se pueda poner al alcance de cualquiera, porque quien lo tiene… nunca lo comparte. Las máscaras de Anonymous, también se venden en Amazon.
Comentarios
Publicar un comentario
El mundo no va a cambiar por lo que vayas a decir ahora, créeme... pero si crees que merece la pena y debes decirlo ¡adelante! Es tu decisión.